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Raciones diarias recomendadas:

1-2 cucharadas al día como suplemento nutricional o para aliviar dolores de garganta.
1/2 a 1 cucharada al día como ingrediente en recetas de cocina.

Recuerda que es importante consultar con un profesional de la salud antes de consumir cualquier suplemento nutricional, especialmente si tienes alguna condición médica subyacente o estás tomando medicamentos.

Preparación: 10 minutos
Conservación: 2-3 meses en el refrigerador

1-Lava los limones con agua tibia y sécalos con un papel toalla.
2-Corta los limones en rodajas finas, aproximadamente 1/4 de pulgada de grosor.
3-En un tazón, mezcla la miel de abejas con una pizca de sal fina o bicarbonato de sodio (opcional). La sal ayuda a reducir la acidez del limón y a preservar su textura.
4-Agrega las rodajas de limón al tazón y mezcla suavemente hasta que estén completamente cubiertas de miel.
5-Coloca las rodajas de limón en el frasco de vidrio.
6-Cubre las rodajas de limón con la miel restante, asegurándote de que estén completamente cubiertas.
7-Cierra el frasco con tapa hermética y refrigera durante al menos 2-3 meses.

Puedes agregar especias como clavo, canela o jengibre a la miel para darle un sabor único.
Utiliza limones de diferentes variedades, como limones Meyer o limones amarillos, para cambiar el sabor y la textura.
Agrega un poco de agua a la miel si deseas una consistencia más líquida.
Utiliza este limón conservado en recetas de bebidas, postres, ensaladas o como una guarnición para platos principales.

Si tienes problemas de salud graves, como una infección bacteriana o una enfermedad crónica, consulta con un profesional de la salud antes de utilizar esta infusión.